lunes, 18 de noviembre de 2013

Noviembre en lucha. Hoy y todos los días.

Noviembre: mes especialmente sensible en la lucha contra la violencia de género. 

Un 25 de Noviembre de 1960, tres hermanas, las hermanas Mirabal, fueron asesinadas por mandato del dictador Trujillo. Años más tarde, en 1981, se celebró en Bogotá el Primer Encuentro Feminista Latinoamericano y del Caribe y, en honor a estas luchadoras hermanas, se propuso el 25 de Noviembre como Día Internacional de Eliminación de la Violencia Contra la Mujer.

Mujeres famosas y mujeres cotidianas, en su día a día, mujeres luchadoras, mujeres valientes, mujeres con miedo, mujeres auténticas, mujeres solas y mujeres acompañadas, mujeres madres, mujeres hijas, mujeres con pareja, mujeres sin ella, mujeres que lloran y también sonríen, mujeres y mujeres y mujeres…
Desde esta fecha y mucho antes, son muchas las mujeres que luchan por acabar con la desigualdad que sufrimos día tras día. 

La desigualdad tiene muchas formas y muchos colores y a veces pasa desapercibida y casi invisible. Sin embargo, ahí está, latente. 

La ONU se pregunta el porqué de este Día Internacional y afirma que éste día fundamental de reconocimiento y visibilidad es debido a que:
  • La violencia contra la mujer es una violación de los derechos humanos.
  • La violencia contra la mujer es consecuencia de la discriminación que sufre, tanto en leyes como en la práctica, y la persistencia de desigualdades por razón de género.
  • La violencia contra la mujer afecta e impide el avance en muchas áreas, incluidas la erradicación de la pobreza, la lucha contra el VIH/SIDA y la paz y la seguridad.
  • La violencia contra las mujeres y las niñas se puede evitar. La prevención es posible y esencial.
  • La violencia contra la mujer sigue siendo una pandemia global. Hasta un 70% de las mujeres sufren violencia en su vida.
Necesitamos muchas cosas para combatir este grave problema pero necesitamos, sobre todo, CONCIENCIA. Saber y reconocer que este problema es de todas, no solo de unas pocas. Conciencia como mujeres y como ciudadanas con unos derechos fundamentales e inviolables. Conciencia que debemos traspasar a nuestras amigas y amigos,  a nuestras familias, a nuestras y nuestros descendientes… 
Está en nuestra mano y en manos de la educación en valores, de la educación basada en la igualdad, en la justicia y en la no violencia, el acabar con esta pandemia que se cobra la vida de miles de mujeres en todo el mundo, que crea víctimas de abusos, malos tratos, vejaciones y violaciones a diario.

Entre TODAS y con la ayuda de TODOS podemos cambiar esta dura realidad.

No hay comentarios:

Publicar un comentario